
La Astrología representa la suma de todos los conocimientos psicológicos de la antigüedad... Carl Jung
SOBRE MÍ
Desde pequeña siempre tuve la inquietud de saber el por qué algunas personas nacían con determinados talentos que otras no poseían y esta misma curiosidad también la tenía con respecto al por qué los habitantes del planeta nacían en distintas partes del mundo.
Estas interrogantes siempre daban vueltas en mi mente así como también me causaba curiosidad la hora de nacimiento de las personas, el por qué unos seres nacían de día y otros de noche, al extremo que cada vez que hacía amiguitos en el colegio, siempre les preguntaba: “¿a qué hora naciste?”
Laboré por muchos años con medios de comunicación impreso y fue a partir del año dos mil cuando mi interés por la Astrología se fue acrecentando más y comencé los estudios de esta ciencia ancestral por cuenta propia.
Mientras laboraba para uno de los periódicos de mayor circulación nacional, tuve mi primer contacto con el afamado profesor peruano, el cosmobiólogo Elmer Trujillo Martínez, a través de la página zodiacal del diario.
Lo llamé y fijé una consulta para mi carta natal y cuál no sería mi sorpresa, que en ese estudio que me realizó el profesor Trujillo, conocí todas las respuestas a las tantas preguntas que de niña me hacía. Asombroso!!!
Inmediatamente comienzo a estudiar por cinco años con mi sabio profesor y mentor en el Programa de Formación Cosmobiológica Astrho Services, C.A., ubicado en Maracaibo, Venezuela.
A medida que iba estudiando la parte técnica, matemática, científica, médica, filosófica, mitológica y psicológica comprendí que la Astrología es mucho más que el arte de predecir, es el arte de conocernos a nosotros mismos, que atraemos lo que somos y lo que tenemos en nuestra configuración astral, y que no sucede nada aquí abajo, que no se forme primero en el cosmos, he allí el origen del nuevo término: Cosmobiología.
Mientras más estudiaba, analizaba e investigaba las casuísticas, más se unían mis dos pasiones, las noticias del día a día… y los tránsitos planetarios, causantes de las noticias más impactantes del día a día, y esperando muchas veces determinado día para saber qué sucedería con algún tránsito que estuviese por venir y así seguir corroborando que “cómo es arriba, es abajo”.
